En un pueblo pequeño, vivía un joven que le gustaba ayudar a la gente de la Tierra. El joven se llamaba: “Thiago”.
Un día un villano hizo un plan: vestirse como Thiago para que lo nombren como súper héroe. Así que cuando ya lo iban a nombrar como súper héroe al villano vestido de Thiago, vino el verdadero Thiago y lo reto a una carrera para saber quién era el verdadero Thiago, y el villano acepto. Pero el villano era perezoso y nunca había corrido. Cuando empezó la carrera, el villano no avanzaba nada. Thiago que si hacía muchos ejercicios, empezó a correr muy rápido, pero de repente, Thiago empezó a escuchar un llamado de auxilio y se salió de la carrera para ayudar a la gente, mientras el villano vestido de Thiago seguía corriendo. Cuando Thiago llegó al lugar, vio que había un incendio y que había gente adentro, entonces empezó a ayudar.
Cuando termino de apagar el fuego y de ayudar a la gente, volvió otra vez a la carrera, pero cuando llego, ya estaban coronando al villano como súper héroe, Thiago dijo que él no era Thiago y que él se había salido de la carrera porque escucho un llamado de auxilio y fue a ayudarlos, nadie le creía, pero luego sus amigos pensaron y se dieron cuenta fácilmente de que él era Thiago y no el otro, porque Thiago siempre cuando escucha un llamado de auxilio va a ayudar, en cambio el otro escucho, y siguió corriendo.
Echaron del pueblo al villano, le pidieron perdón a Thiago por no creerle y lo coronaron como súper héroe.
Milagros Vilela
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